Política monetaria no convencional y flexibilización cuantitativa (QE)
¿Qué describe el término Quantitative Easing (QE)?
Dr. Benjamín García Martínez 25 Enero 2021
La QE es parte de lo que ahora se conoce como política monetaria no convencional.
Cuando la tasa de interés nominal es cercana a cero, esta forma de apoyar la economía se vuelve menos efectiva; entonces, el banco central puede intentar respaldar la economía comprando grandes cantidades de activos financieros para hacer que los activos de riesgo sean más líquidos y/o reducir las tasas de interés a largo plazo. Una forma de política monetaria no convencional, son compras de activos a gran escala “large-scale asset purchases” (LSAP) a menudo se denominan simplemente QE.
¿Cuáles son los canales de transmisión que se esperan?
- Confianza: mejorar la percepción pública de las perspectivas económicas
- Señalización de políticas: señala el compromiso del banco central de cumplir con las metas de inflación
- Rebalanceo de Portafolios: elevar el precio de los bonos del gobierno, pero también indirectamente aumentar el precio de otros activos
- Liquidez del mercado: Fomentar activamente el comercio en tiempos de dificultades en los mercados financieros.
- Dinero: un mayor nivel de activos líquidos podría inducir a las instituciones financieras a prestar más
Después de la contracción del mercado financiero experimentada durante el verano de 2007, el Comité de Operaciones de Mercado Abierto (FOMC) comenzó a reducir la tasa objetivo de los fondos federales. Sin embargo, la tasa objetivo de los fondos federales perdió su poder de proporcionar un mayor estímulo a la economía cuando alcanzó el límite inferior cero en diciembre de 2008. Durante los siguientes años, el Banco Central (la Fed) ha llevado a cabo cuatro rondas de LSAP:
- El 25 de noviembre de 2008, el FOMC anunció lo que llegó a conocerse como QE1: la Fed compraría hasta $ 100 mil millones de obligaciones de deuda directa emitidas por Fannie Mae y Freddie Mac, y $ 500 mil millones adicionales de Mortgage-Backed Securities (MBS) de la agencia (Los bonos están respaldados por la plena fe y el crédito del gobierno de EU y, por lo tanto, están libres de riesgo de incumplimiento). El programa se extendió y expandió en marzo de 2009 y, para el final de QE1 en marzo de 2010, la Fed había comprado $ 1.25 billones en MBS, $ 175 mil millones en deuda de agencias federales y $ 300 mil millones en valores del Tesoro de EU.
- En agosto de 2010, el FOMC señaló el inicio de una segunda ronda de flexibilización cuantitativa (QE2), que luego se implementó oficialmente en noviembre de 2010. QE2 consistió en una compra total de $ 600 mil millones en valores del Tesoro a largo plazo.
- Posteriormente, el FOMC anunció una tercera ronda de flexibilización cuantitativa (QE3) en septiembre de 2012, solicitando compras mensuales de $ 40 mil millones en MBS de agencias y, a partir de enero de 2013, $ 45 mil millones en valores del Tesoro de EU.
- El 15 de marzo de 2020, la Reserva Federal de EU anunció su plan para implementar hasta $ 700 mil millones en compras de activos como una medida de emergencia para proporcionar liquidez al sistema financiero de EU. Esta decisión se tomó como resultado de la enorme agitación económica y del mercado provocada por la rápida propagación del virus COVID-19 y el consiguiente cierre económico. Las acciones posteriores han expandido indefinidamente esta acción de QE
¿Funcionó la QE?
La pregunta que surge entonces es si la provisión de crédito adicional resultó en actividad económica real adicional, ayudando así a cumplir con el mandato de la Fed.
Algunos observadores han argumentado que la QE crea nuevos riesgos para la estabilidad financiera o la inflación, pero no es útil para cumplir con el mandato de la Fed de lograr la estabilidad de precios y el máximo empleo.
Si de manera unilateral los EU inician, a partir de la crisis financiera, una nueva ola de expansión del crédito, el resto del mundo compraría este quebranto, evitando el ajuste y caída en los valores de los activos en los mercados y el valor de su moneda. Sin embargo, si al mismo tiempo, el Banco Central Europeo, el Banco Central de Inglaterra, el Banco Central del Japón, aplican la misma fórmula (QE), al tiempo que contraen su Política Fiscal, para asegurar la “estabilidad financiera”, lo que ocurre es un incremento en los valores financieros, sin que necesariamente esto se traduzca en una reactivación de la Economía y crecimiento económico.
Sin duda, los altos niveles de endeudamiento con tasas cero, llevan a una mayor vulnerabilidad financiera y toma de riesgos de los participantes de los mercados financieros.
Tal vez sea el momento de plantearse redireccionar la política de endeudamiento del Banco Central, no solo a proveer liquidez y confianza al Sistema Financiero, sino de reactivar la Política Fiscal a la Inversión Pública.